He observado a mis semejantes esta mañana, cada mañana.
Es sencillo deducir que están agotados
desde antes de comenzar su jornada,
les miro cansados,
raramente desde muy temprano.
No están durmiendo,
solo no se han percatado
de que la vida así es no vivir,
aún cuentan con algo
que impide considerarnos muertos
se trata de alguien,
tal vez una meta,
quizás un sueño