Los besos que me distes:
de tus labios,
de tu amor,
de tu corazón,
alojados para siempre
quedaron dentro de mí.
¿Y los besos que te di
dónde fueron a parar?
Y yo que lo pensaba
que sería para siempre.
¡Nuestro amor vida mía!
Las lágrimas derramadas
llegaron a tus pies,
mucho tiempo que ha pasado
y tus huellas aún presentes
con lágrimas muy secas,
recuerdos del ayer.
Los besos y un te quiero
muy pronto se olvidan,
si el amor en cierto día
con un adiós se despide.
Sin ti,
sin tus labios,
sin tus besos.