Porque te veo donde florecen los jazmines
porque te escucho en los cantos de los pájaros
porque te imagino de reojo entre la multitud
porque te sueño despierto mirándome amablemente
amor, cómo te amo
se oscurecen afligidos los álamos
ante mi dolor cerco
¡Qué tonto parecerá pensarte tanto!
Pero el pensarte tanto, me encanta
te pienso
y cómo te amo
quiero pensarte todos los días
de siete a cuatro
que pensarte sea mi oficio
aquel que nunca tuve.