CUANDO APRENDA
Cuando aprenda a escribir,
dibujaré tu nombre
con la indeleble tinta
de sangre de un clavel.
Cuando aprenda a expresarme,
recitaré los versos
que en mi corazón nacen
de sus tallos aéreos.
Cuando aprenda a soñar,
las negras golondrinas
que viven en mis sueños
¡Las echaré a volar!
Cuando aprenda a reír
será mi patio un antro
de alegría sin fin.
Cuando aprenda a ser hombre
te cantaré mis versos.
Escribiré tu nombre
en las brisas salobres.
Buscaré golondrinas
allá donde se esconden,
y las pondré en tus manos
entre risas y flores.
¡Cuando aprenda a ser hombre!