Unos versos añejos que han estado
ocultos en algún rincón perdido,
después del mucho tiempo transcurrido
hoy, por casualidad, los he encontrado.
Hundido entre las sombras del pasado,
perdido tras el muro del olvido,
un viejo amor ya muerto está escondido
y su fuego de ayer hoy apagado.
Al releer lo que escribiera otrora
aquel lejano y olvidado amor
ha despertado en mi memoria ahora
un recuerdo tan dulce en mi interior
que siento que en mi alma soñadora
ha brotado el renuevo de una flor.