José Valverde Yuste

HOMENAJE A CRÍSPULO, HOMBRE DE LA ROSA

En tierras lejanas, con más precisión, de Torrelavega 
cabalga un hombre valiente, noble y señor.
Con coraje en el pecho y firme resolución,
es ejemplo de virtud y verdadera pasión.

Es cortés en sus tratos, amable al hablar,
su espada defiende la justicia sin cesar.
Con gesto gallardo y mirada audaz,
cruza mil caminos con temple veraz.

Hombre de la Rosa, gran Críspulo,
defensor de la poesía y de los desengañados,
tu pluma es como un susurro en la noche,
que alumbra el camino de los extraviados.

Con versos que brotan del alma pura,
retratas la belleza y la amargura,
con cada estrofa, con cada palabra,
conviertes en verso la tristeza más rara.

En tu mirada se refleja el universo,
en tus versos, el dolor se hace poema,
defiendes la verdad con valentía,
y luchas por la justicia y la armonía.

Hombre de la Rosa, Críspulo amado,
en tu poesía está todo lo sagrado,
eres luz en la oscuridad del mundo,
y tu pluma es el escudo profundo.

Que sigan tus versos resonando con fuerza,
que en ellos encuentren paz y belleza,
porque en cada rima, en cada estrofa fiel,
siempre estará presente tu espíritu fiel.

Hombre de la Rosa, gran Críspulo,
defensor de la poesía y de los desengañados,
tu legado perdurará por siempre,
en el corazón de los que han sido por ti versados.