Transito por caminos pedregosos
suplico los perdones de los dioses
camino con mis miedos y reproches
mirando fijamente a esos tus ojos.
Me cargo mis pecados a los hombros
en clara penitencia y con derroche
purgando esos pecados por las noches
rezándote oraciones en hinojos.
Percibo tus palabras de amenazas
puñales que se clavan en el alma
robándome la esencia y mi sosiego.
Descansas en el medio de mi cama
me niegas el desnudo que recatas
y me hundes en el fango sin remedio