Madre querida, en el cielo estás,
y mi corazón contigo está.
En mis sueños te veo volar,
entre las nubes y el azul del mar.
y siento tu amor en cada despertar.
Madre querida, en el cielo estás,
cuidando de mí desde allá.
Un día volveré a encontrarte,
y juntas en el cielo podremos estar.
Hasta entonces guardaré en mi alma,
la certeza de que siempre me vas a amar.
Madre querida, en el cielo estás,
mi mejor ángel, mi luz y mi paz.
Te llevo conmigo cada día,
hasta que llegue el momento de abrazarte en la eternidad.
GM