jvnavarro
JUGANDO CON EL AMOR
Llamemos loco al amor desmesurado
y juguemos si el amor nos deja
con la locura
de quienes enamorados
quieren vivir su especial aventura.
Son los años locos
entre riadas de risas,
los mejores de nuestras vidas.
Nos vestimos de locos
para acudir a una cita
y la locura ya convertida
en todo aquello que arrasa
nos lleva por caminos
de otras vidas
y se convierte sin que nadie se lo diga,
en parte de historias
que si se cuentan dan
para escribir miles de libros de poesías.
Loco el poeta escribe un verso,
pura geometría
y otro y otro y así camina,
pegando saltos,
entre escalofríos de fraternidad,
rima que te rima,
de tal forma que cuando lo acaba
y en él se mira,
ve en entre líneas,
en el que es el poema de su vida,
unas aguas tranquilas,
un cielo suave
como una ligera pluma,
un cepo de cristal de Baudelaire
para cazar a los Cupidos,
imprudentes viajeros
que se equivocan de rutas
y un bosque florido
en el que cantan
todos las aves que vio Malaspina
en su expedición científica
por Sudamérica y Oceanía.
Y así se da carpetazo
a este simbólico y extraño poema
que me he sacado de una manga,
corriendo y de prisa,
en mitad de una sesión de magia blanca
en que yo de anfitrión hacia.