En danza de fuego y miel, somos amantes y amigos,
Un equilibrio perfecto entre pasión y sosiego.
Seré tu oasis, refugio en medio de la tormenta,
Un remanso de paz donde tu alma se acuna y contenta.
Seré tu tormento, fuego ardiente que te consume,
Un volcán de emociones que tu ser consume.
Desnudaré tu alma con palabras que te estremezcan,
Tinta ardiente que tus deseos despiertan.
Seré para ti:
Un café humeante en íntima charla,
Confidencias susurradas bajo la tenue luz de la lámpara.
Vino tinto que enciende tus deseos más profundos,
Liberando la pasión que en tu interior se esconde.
Refugio donde halles tu yo más íntimo y puro,
Un espacio seguro donde te sientas amada y segura.
Seremos uno solo, sin ataduras ni promesas,
Libres como aves que surcan las nubes sin pesas.
Con mis versos, sentirás el roce de mis manos en tu piel,
Mis palabras te harán vibrar con la intensidad de mi amor fiel.
Y cuando me leas, un cosquilleo recorrerá tu cuerpo,
Como la caricia más dulce que te llena de anhelo.
Estaré contigo, explorando los rincones de tu mente,
Descifrando tus enigmas y en tu alma me adentraré sin precedente.
Te abrazaré con ternura, brindándote el calor de mi ser,
Ahuyentando las penas y haciéndote sonreír, mi deber.
Sin ataduras ni promesas, nuestra conexión será eterna,
Un vínculo que nos une como la tinta en esta página incierta.
Juntos escribiremos la historia de nuestro amor en cada verso,
Un poema infinito que perdurará en el tiempo, como un universo.
En cada encuentro, nuestros cuerpos se fundirán en uno,
Una danza sensual donde la pasión se encenderá sin importuno.
Susurros al oído, besos que queman y caricias que enloquecen,
Un torbellino de emociones que nuestros cuerpos enloquecen.
Seremos amantes eternos, unidos por la sensualidad,
En un poema de fuego que jamás tendrá finalidad.
JTA.