Me dices...
Que la vida, se deja vivirla,
que ella abre y cierra puertas
para iniciar nuevas experiencias,
cubriéndonos de energía curativa y
amorosa, dando oportunidad de empezar
sin tropiezos en cada amanecer.
Te respondo:
Hoy, en mi despertar, te encuentras tú,
contigo experimento paz, sobre todo,
mis temores se esfuman, mi pudor se evapora
y si comento errores, ahí estás, incondicional,
ayudando a corregirlos con ternura,
sin arrogancia ni malicia.
Te admiro, porque no me críticas,
ya que en cada fallo me enseñas a no caer
demuestras como debo caminar triunfante
por cada sendero de aprendiza,
y ahí voy, sin miedos ni te mores,
porque entregas tu confianza
dejándome ser como soy.
Eres luz de paz alimentando mi alma,
ya que cuando mi aliento se agita
y mi corazón palpita de emoción,
fluyes cual sangre por mis venas
llenado a mí respirar de tranquilidad,
inyectando calor a mi helado cuerpo,
Pero cuando no estás... Mis días se nublan
son diluvio de desolación, tornados de nostalgia.
Ángel mío, naveguemos sin rumbo,
disfrutemos este nuestro destino
no dejemos que se muera en el tiempo,
llévame contigo, iniciemos un amanecer
con un nuevo aprendizaje.
Magali Aguilar Solorza
(Quiet Night)
Marzo/4/2014 8:54:36pm
Autora mexicana
Poema publicado en la Revista Poética Azahar No 130, Facebook mis Retos Poéticos.