Veremos si vienen
las garzas de mayo,
también las gaviotas
al puerto cercano.
Las unas acuden
al pie del ganado
en busca de insectos
que toman del prado.
Las otras se acercan
al puerto y al barco,
en busca de pesca
y restos dejados.
Detalles floridos
de mayo, en un cuadro,
que anima los ojos
igual que los labios.
Y pasan los días,
se acerca el verano,
y mayo nos deja
sonrisas y halagos.
Recuerdo, hace tiempo,
en años pasados,
mirar unos ojos
y a ellos rezando.
Buscar las pupilas
y luego unas manos,
tomar a las tuyas
que estaban temblando.
Besar unos ojos,
un pelo y tus labios,
decirte \"te quiero\"
robarte un abrazo.
Yo pido que vuelvan
los días de antaño,
aquellos sin nombre
que tanto he soñado.
Rafael Sánchez Ortega ©
13/05/24