John morales

A Loreto Cortés

A Loreto Cortés

 

Para Loreto Cortés, esta emoción selecta y bravía,

nacida de lo recóndito de un azul y febril suspiro.

Allí, donde se une su ser, de allí... musas respiro.

A vuestra beldad, proclamo esta dulce poesía:

 

¿Habeís visto a Loreto Cortés? en la incanzable espera

de aquél varón al que pronto llamará «¡Mi amado!».

Ese extranjero que en sueños se ha manifestado.

Y que hace brotar su alma, como flor en primavera.

 

¡Qué garbo enaltece el ritmo de sus pasos al andar!

¡Qué sonrisas se manifiestan en sus dos labios!

Y son semejentes a los ósculos de dos sabios.

De su plenitud nacen aguas diáfanas como el mar.

 

Ha de esperar la llegada de amado mirando un celaje,

como las mozas greyes esperan a su fiel pastor.

Así, Loreto, aguarda apercibida a su gran amor.

Y ya juntos han de dibujar su amor en un paisaje.

 

Para: Loreto Cortés.