Ella y Yo
Ella y yo no crecimos juntos, solo nos conocimos en un hermoso día como su rostro. Yo la mire y me quede atónito Y en ese mismo instante me ilusione en lo único que deseaba era en mirar su rostro y su hermosa mirada la misma que sigue robándome el alma. Yo con mis atónitos ojos, Me quedé enamorado de ella ese mismo 14 de febrero. No me eché atrás, pues en ella encuentro todo lo que añoro y necesito Ella y yo en un lugar lejos de lo desconocido, en un lugar común y corriente donde los labios dulces de ella y un plebeyo se apaciguan como dos tórtolos bien unidos.