Dame lo que tú me pides
que corriendo te lo doy
y al pedir nunca descuides
que también yo quiero amor.
Dame lo que tú deseas
y que esté dentro de ti
por favor, quiero que veas,
que mi amor no tiene fin.
Dame lo que vas pensando
que quisieras tú de mí
y preguntaré hasta cuándo
a mi vida has de venir.
Dame siempre lo que sueña
tu cabeza al despertar
que del sueño te haré dueña
y de tu felicidad.
Dame lo que tú me pides
si en esencia quieres dar
porque siempre en estas lides
mucho importa la igualdad.