Norberto Osvaldo Algarin

Romántica

Si en tu ardor adolescente

un silfo ahogáis en la fuente;

si lloráis inútilmente,

dulce niña, es el amor...

¡Las revueltas mariposas!

Y sobre las blancas rosas

se desangra el ruiseñor

de Wilde en tierno embeleso.

¿Y tú ansiosa por el beso?

Dulce niña, es el amor...