Mary Mairena

A Leonardo

¡Oh! encantador y bello niño aún te recuerdo cuando logré cargarte en mis brazos por primera vez.

No ha pasado mucho mi león, mi corazón te haz convertido en todo un hombre hermoso y valiente.

Qué llena de alegría mi corazón

Haz caminado bajo invierno, verano

Y cuando llega la primavera tus ojos brillan

Con esa sonrisa tan bella, calmas mi dolor y mi sufrimiento.

Te he protegido tanto que ahora no se como dejarte ir como soltarte para que vueles

¡Si eres mi mayor ilusión!