Escucha al viento susurrar,
Como un amante que acaricia tu cara al pasar.
Nota como mece tu pelo,
Acompañando tu caminar.
Escucha la voz del viento,
que se mezcla con el murmullo del arroyo.
A veces suave con suspiros de ternura,
a veces con feroz latido apasionado.
Escucha el lamento del niño que llora,
observa sus inocentes ojos que reflejan
un mundo que no entiende.
Escucha al viento, como se lleva sus penas al pasar.
Escucha al pequeño ruiseñor en su canto,
Tejiendo sueños y secretos en sus notas.
Sus melodías son más que simples trinos,
son promesas de amor y de esperanza.
Escucha las olas como enamorados tímidos,
susurrando a la arena palabras de cariño.
La espuma como abrazos efímeros,
fundiéndose con la arena en un beso salado.
Escucha al cervatillo herido y tembloroso
Buscando refugio en la quietud del bosque,
Al viento acariciar su pelaje,
Como un consuelo maternal.
Escucha, siente, observa y cree,
en la belleza que te rodea y te llama.
Porque la esperanza es la luz que te guía,
Hacia un futuro donde la felicidad reside.