Mujer de nadie, piel morena
Caminas por la vida sin dueño
Con la mirada fija en el horizonte
Llevas contigo un amor sin nombre.
Tus huellas se pierden en la arena
Cada paso que das es un sueño
Eres la sonrisa en la noche
La esperanza en medio del desvelo.
Mujer de nadie, corazón valiente
Luchas contra viento y marea
Tu fuerza es un fuego ardiente
Que ilumina la oscuridad más cruenta.
En tu silencio guardas secretos
Historias que nadie ha escuchado
Eres poesía en movimiento
Una musa con el alma entrelazado.
Mujer de nadie, alma libre
Tu libertad es tu mayor tesoro
Eres un misterio por descubrir
Un enigma que guarda un tesoro.
En cada mirada hay un universo
En cada suspiro una melodía
Mujer de nadie, eres el verso
Que la vida escribió con maestría.
“Serl”