Te esperé en mi sueño
esperaste hasta el final;
tu ilusión rayo en lo real
de tu corazón soy el dueño.
Esperaste con ilusion;
tibia noche solitaria en soledad necesaria
se fortaleció tu decisión.
Desaparece la duda,
visible en blanco cielo,
aceptaste sin recelo; corazón no te escudas!
Por el amor te quedaste
soportaste con ansiedad
en un gran mar de levedad
hacia la orilla nadaste.