Vida loca que rueda
por el mundo.
Sueño dormido
en el tiempo,
dormido
en la distancia,
es la vida.
Vida,
torbellino incandescente
en la lejanía
postrada del cosmos,
fragua de
irritante licor,
zumo almibarado
del destino
que todo lo embriaga
embriagando la vida.
Esa vida loca
que rueda
por el mundo.
Que se amamanta
del seno envejecido
de la tierra
que no se arruga
con el paso
de los años.
Que busca
en la ignota y
centelleante
vastedad de lo etéreo,
en lo infinito y
en la caldera
íntima de la materia
la razón de su ser.
Esa loca vida
ha encontrado
sólo un espantoso
o un dulce
aroma a:
¡A no sé qué!
Yo te sostengo vida
en tu indecisión,
en tu inconforme.
Sigue soñando vida
con la vida,
con la eterna
contradicción.