xesca

Oda a Cádiar

En las faldas de Sierra Nevada,

donde el aire puro se respira,

se asienta un pueblo lleno de gracia,

de un pásado morisco que nos mira.

 

Con tus veladas troveras, teatrales,

tus calles son páginas de historia,

de costumbres cuidadas, ancestrales

nuevos tiempos florecen tu memoria.

 

Tus viñedos, almendros en flor,

y tus olivos, acuñan tu suerte,

con su gente desprendiendo amor

con solo el deseo de venir a verte.

 

Celebrando en tus fiestas populares

el hechizo de tu fuente del vino

crece el deporte entre nuevos festivales

regalando elixir al peregrino.

 

Crece Cádiar entre Yatór y Narila

entre acequias, senderos y tus fuentes

son las aguas del guadalfeo melodia

que enamora al viajero en sus afluentes.

 

Se asienta una dama majestuosa

en pleno corazón de la alpujarra

esa es Cádiar, jugando a ser hermosa

sobre cuerdas de una dulce guitarra.