SALIMOS DE EXCURSIÓN
Son pueblos más bien pequeños,
se levantan a los lados del camino: Agost, Villena,
San Vicente y Petrer. Yo iba dirigiendo,
circulando y nombrando todos estos pueblecitos:
por el este, Cox, al oeste, Monóvar con su castillo moro,
con sus castillos, con sus explanadas por delante de los muros
que el tiempo trata de derribar.
Yo iba dirigiendo, pero me ceñía al itinerario
disfrutando al mismo tiempo del panorama.
Dejaba atrás las villas de Elda y de Villena
alcanzando la mayor velocidad permitida,
las tierras que un día fueron vírgenes
al borde de la mar en calma
hoy postradas, heridas, maltratadas, sin embargo,
por los excesos del urbanismo,
bañadas todavía por el sol y por su luminosa
perseverancia. Y de toda aquella luz sin mácula
queda intacta tan solo una pequeña parte:
soñolienta, reseca, y sí, como adormecida,
que no he sabido esquivar.
Gaspar Jover Polo