Patricia Aznar Laffont

SIEMPRE DANI (dedicado a la niña poetisa Marie Danielle Lambert García que aún vive en mí)

Fuiste el Tiempo de los Soles

entre los Desiertos de mi Vida

y los Mares Quebrados de la Muerte.

 

Fuiste la Sombra y el Ángel 

que Sembró la Arena

que Resbaló en tu Angélica Sombra.

 

Fuiste Sol y Luna.

Estrella y Vida.

Inocencia y Tragedia.

Fuiste Agua y Pan

y Tanto Más...

 

Fuiste el Verde Aroma de Limón 

que en el Empedrado Húmedo de mi Alma,

Aún te Llora.

 

Entre Deshojados Inviernos del Lejano Amberes

 Desmaya aún tu Rosa Púrpura y sin Espinas.

 

Y en la Valencia de tus Amores

que Amabas

Aún estás, Dani!

 

En el Ondulante titilar de Tu Estrella

y el Jardincito Pequeño y Florido

que Elegiste

antes de tu Silencioso Partir

Inesperado.

 

Marcará el Compás Doloroso

el Reloj Sin Agujas de tus Horas,

cuando tus Brotes-Versos

Adheridos a la Muralla de Hiedras 

de tu casi Perdida Ausencia,

Demuelan las Horas y Distancias,

 

Cielo y Tierra Malheridos,

Brisas y Tormentas.

 

Paredones Enmohecidos

y Cercanías en la Dulce Palma 

de tu Brisa-Caricia...

 

Dulce Niña en Desamparo.

 

Seguiré Siendo hasta mi Viaje Eterno

Tu Orgullo de Madre,

Y el de seguir Pintando

mis Labios

con tu Nombre:

 

Dani,

Dani

y sólo Dani...

 

 

(Patricia)