Dr. Salvador Santoyo Sánchez

CALLADAMENTE

Callado, tocaré sólo la punta

la punta de tus dedos tan silentes

esperando mañanas diferentes,

ojera en tu pupila que pregunta.

 

Tú tienes en la palma de tus manos,

los cauces de los ríos recorridos,

tus caricias no viajan al olvido.

De tu piel sus lugares tan Arcanos.

 

Viajando al lago rosa de tus uñas

dejan huella en mi espalda que es tan tuya,

muy sonriente, mi Ser, tú sola empuñas.

 

Y lo siembras en ti, como una puya

al tiempo que marcan huella tus uñas.

el río del Edén deja que fluya.

 

Dr. Salvador Santoyo Sánchez

29/05/2024