En cualquier momento de la vida,
No sé cuándo puede ser,
¿Seré grande alguna vez?
Dejare los juegos y muñecas para convertirme en verdadera mujer.
En la vida, alguna vez,
Derramare este mar de lágrimas que me hacen ahogar,
Dejare la tristeza, los sueños e ilusiones,
Entonces será verdadera realidad.
Una vez para siempre en la vida,
Veré es verdadera realidad,
Abrir los ojos y dejar de soñar,
Reconocer la vida en verdad y no volver a llorar.
¡Miserable humildad!,
Como te odio,
Como desearía arrancarte de mi ser,
Sacar este dolor que me empobrece el alma,
Abrir la ventana del corazón y volver a empezar.
No llorar nunca, ¡Oh bendita humildad!,
No sentir nada ni recordarte alguna vez,
Sentirme vacía para no llevarme nada,
Devolver el tiempo a ese día, cuando vi la luz por primera vez,
Comenzar fuerte y terminar fuerte también.
Ser liberal, abrir los ojos,
Gritar más fuerte cada vez, saciar mi ego,
Tragarme hasta la dignidad y la vergüenza de regreso enviarla.
Esa quisiera ser yo,
Romper este cascarón que me encierra,
Alistar las alas de mi gran corazón,
Volar muy alto, más alto que nunca,
Disfrutar las alturas y volver a soñar.