Él decía amarme... Pero, en realidad solo me necesitaba...
Jamás hubo tal Amor! Jamás de mí se enamoro!
-\"Era su sueño\" decía... Y ahora lo sé, pues despertó y de su lado me alejó!
Ahora dice estar triste, ahora dice extrañar mi voz, sin sospechar que fue su voz la que me grito tan terrible ADIOS!
Debo confesar que jamás yo lo esperaba, debo confesar que sus palabras partieron mí Alma...
¡Me hicieron sufrir! ¡Me hicieron morir!
Y heme aquí, caminando un día a la vez, llevando en mi meroria y en mi piel cada recuerdo, cada suspiro, cada latido...
Día a día, pregunto al Cielo ¿hasta cuando dejará de doler!?
-Y solo puedo pensar, que es mí castigo...
Por atreverme a Soñar con ese Amor que jamás existió!
¡Ese Amor que conmigo solo jugo!