Y quien iba a creer
quien iba a pensar
que detrás de esa dulce mirada
se encontraría una alma llena de maldad,
llena de obscuridad.
No me di cuenta cual mala seria,
solamente me cegó con su amor tan perfecto,
me ilusiono en cuerpo y alma,
tenía un mundo de felicidad a sus pies,
pero de nada sirvió
porque ella se alejó,
tirando a la basura todos los sueños e ilusiones
dejando mi alma rota y mi corazón vacío.
Edgar Lima.