Freddy Kalvo

Sonetillo enigmático LXXXVII

El bosque se iluminaba

con estrellas y luceros

del color de bellos cedros

con sus frondas aparradas.

 

Y en el valle se miraban

emanando sus destellos

que llegaban hasta el cerro

y hasta la espesa montaña.

 

Estos ojos se alegraron,

al mirar tanta belleza.

Esa noche, muy temprano,

 

le pedí a muchos Poetas

descifraran lo plasmado

dando su vital respuesta.

 

Cuenta regresiva: solo quedan 13

Siempre le invito a leer el comentario de autor. Éxitos. Muy agradecido.