Lourdes Aguilar

TASA Y MEDIDA

En el afán de rellenar los espacios

La casa se está quedando vacía

Resguardaban sueños los techos

Que otrora subían suspirando al cielo

la felicidad se complacía con poco

aspirando más a la compañía y cariño

Pero conforme van entrando las cosas

Por las ventanas se van desechando

Con los envoltorios de tanto producto

 

Ante esas pantallas de todas medidas

la mente cedió todo candor y fantasía

Muebles, aparatos, adornos, vestidos

Los sentimientos se vuelcan en ellos

Y hasta el prójimo tiene su tasa y medida

Los animales, las plantas, los mares

la tierra, las sierras y hasta las nubes

son parte de ese mercado salvaje

expuestos y engullidos sin tregua 

agotándose ante la indiferencia y rapiña

 

El interés por lo esencial se desvía

Ante el bombardeo de consumo continuo

Y sin afianzarse las prioridades se esfuman

La casa no logra convertirse en hogar

Afuera solo hay miseria o riqueza

Y miedo enorme de un extremo al otro

en el espejo solo hay fealdad o belleza

e interiormente frustración y codicia

 

Los objetos reemplazan los primeros ideales

Con compras el amor genuino se esfuma

El romance es una flor pisoteada

por la sociedad pervertida y viciosa

El verbo una peligrosa serpiente 

que hasta los niños bien pronto adoptan

Empaques, bolsas, cartones se apilan

Deleitando los ojos con nuevos objetos

Eso ahora produce placer

Y un intenso deseo de más