SANTILLÁN

Regálame un momento

 

Restaurante de suaves aromas,

Deleite preciso al Observar Tu silueta,

Deslumbra y apetece;

Copas de vino que se paladean en tus labios.

 

Manjar tu cuerpo al abrazar,

Aperitivo que rompe cadenas,

Que abre la frontera del sentimiento,

Más la obscuridad de la noche.

 

El tic Tac del reloj y una balada,

Alimenta el corazón al juntarnos,

Ojos brillosos de vida, minuto a minuto;

Alientos que se entrelazan en un beso ardiente.

 

Noche que ha sido rota al tic tac.

El adiós jamás nombrado,

Pero tú nombre nunca es borrado

De mi pecho y mis labios.

 

Vida, alegría, felicidad y plenitud,

Perdida en una cita JAMAS OTORGADA.