Si dudaste de mi amor mujer
que bueno, ahora yo no creo en tí,
ni tengas la esperanza de volverte
a ofrecer lo que tenía para vos;
seguiré mí camino y sé que mi Dios
me bendecirá con alguien que me
ame de veras, porque siempre llevo
mi sencillez, y te agradezco por
no creerme, porque eres una que
te gusta la cosas buenas, y tú qué
ofreces ,hasta tus manos son delicadas
y de trabajar, no conoce de eso.
Hoy te veo que no tienes quien te
de los lujos que tú quieres, aunque
seas tan bella por tu forma de ser.