Voy por la vereda
mirando hacia el cielo,
siguiendo un anhelo,
huellas en la rueda;
de ayer nada queda,
se acabó mi duelo,
recibo el consuelo
de labios de seda;
eres bella estrella,
hermoso lucero
puerto celestial;
eres la doncella,
que por siempre quiero:
mi pareja ideal...