De repente, y sin previo aviso te cuelas.
Entre las rendijas del alma, y a través de las grietas del tiempo,
sin autorización, y con aspecto prohibido,
te metes, te cuelas y apareces.
Si te saco, entras, y si entras no sales; ¿lo sé o lo quiero?.
Porque entre secretos y justicias,
entre verdades y mentiras,
entre lo bueno y lo malo,
te mueves sutil, suave y fascinante, y ni siquiera lo sabes.
Y entonces, se revuelve el deseo, el sentimiento y la verdad.
¿Cómo lo haces, si ni siquiera existes?.
¿Cómo lo haces, si no tienes una absurda oportunidad?.
Solo sé que lo harás de nuevo,
sé que volverás, sé que allí estás.