Dantés Espinoza

Metamorfosis

METAMORFOSIS

 

¡Ay de mí!

Con la noche callada,

mi cerebro enardecido

se acurruca suplicante

a mi corazón dolido:

¡Lo humano a lo humano!

 

¡Ay de mí!

Como quema la gris sustancia

serpenteando cual enredadera

con sus largos axones por entre

ajenos pesares y melancólicas

agonías que el futuro nos depara.

 

Y, cuando el mal vence al bien

es el demonio quien saca las garras.

Y, cuando ese dios todopoderoso 

que dejó de serlo bendice al mal

es cuando el soberano inerme queda.

Es lo que a diario vemos, ya.


Metamorfosis del pensamiento

son los incontrolables sentimientos

que asfixian al juicio y al alma,

al quehacer cotidiano en su devenir

histórico, y a la vida misma.

 

¡Ay de mí!

Como el espíritu impregna la carne.

Como la carne transforma la naturaleza.

Así:

Con el último suspiro se ahoga el alma,

la carne se hace polvo 

y sólo queda en el lamento los recuerdos

sin que haya un limite para el demonio.

 

¡Ay de mí, producto de la naturaleza!