Angelica Orozco Solis

ENTONCES UN DIA…

Te amé infinitamente 

hasta que me traicionaste,

elegiste perderme

y con cada encuentro, con cada engaño

fuiste desmoronando mi amor que solo era para ti

 

En tus momentos de traición me humillaste ante una mujer vil.

Tú amor por mí, burla infinita.

Tú amor por mí, sentimiento inexistente.

Tú amor por mí, flor marchita.

Tú amor por mí, muerte inminente.

Destrozaste mi corazón pedazo por pedazo.

con cada día, con cada año en qué tu amor fue solo un engaño.

Sí me conocías… sí lo sabías…

Que con la misma fuerza para amar

con esa misma fuerza puedo odiar.

Ahora no te extrañe

que jamás te voy a perdonar.

Hoy ya para ti no me queda nada,

no hay nada por salvar.

Eres humo que se desvanece,

humo que con el aire se va.