De tanto rodar por el suelo
y tanto pasar polvaredas
hoy vivo cruzando fronteras
con mucha confianza y denuedo.
De tanto escuchar los lamentos
y tanto ladrar de las perras
hoy sigo insistiendo que vean
maldades que a diario yo veo.
De tanto escribir mis palabras
en versos que siempre comparto
y vienen directo del alma,
yo siento que a veces me canso
si el verso no sirve de nada,
si el verso no canta tu canto.
**
Yo vivo por lo que siento
y siento lo que yo vivo
si con mi verso cultivo
verdades y sentimiento.
Y aprendo siempre del viento
si con el viento convivo;
mas siempre habrá algún motivo
que con razones disiento.
Yo vivo con mi alegría,
yo vivo con mi tristeza
y el verso es mi compañía
en medio de mi flaqueza,
mas siempre la pintaría
colmada con su belleza.