¡Vida! Dame tus llantos terapéuticos
que llevarán esas lágrimas dolosas
y acaso los hedonismos hermenéuticos,
recordio pleno de vivencias asombrosas.
-
Corra salina humedad en sibilinos parpadeos
por la ruta epidérmica de erosionados años,
fluir de sublimados alivios, itinerarios de apogeos,
asamblea de jolgorios y almanaques en los estaños.
-
Construí sin losetas ni cemento testimonial, arquitecturas...
torres de semblanzas enhiestas en el padrón de los sueños
confiables por seis décadas hasta la vejez de las fracturas,
luego vino dictatorial homo Biología y cesaron los empeños.
-
Y aquí estoy. Geronte y en Soriano del río postigo,
camino acuoso y vegetal, diseño de la secular Eternidad,
predestinada, sagrada y escrita en el divino Código:
¡Por fin! alcanzaré, de las almas, la suprema Libertad.