Era el amor en la fina poesía,
canto de paz en los tiempos de guerra.
Nube de luz y pasión y alegría,
dulce reflejo de gozo en la tierra.
Era la noche fogosa y ardiente,
cielo de lunas que juegan en vilo.
Pacto amoroso jurado de frente,
plata y carmín que se enredan al hilo.
Era la flor el tesoro en la mano;
musa y juglar de incontables historias,
diosa y mortal en el templo profano,
dijes sin nombre en selectas memorias.
Era quizá lo valioso de todo,
hoy un pedazo de nada en el lodo.
Crystal CG.