Si soy mediocre, ¿tengo tiempo de mirar al suelo?
No sirve de consuelo
pensar que he aceptado
la realidad de que soy yo y por eso no puedo
Si ya he caído, qué más da, respiro, emprendo el vuelo
No vivo de recuerdos,
lo que fue ayer se queda escrito justo en el pasado
Lo único que se ve, es esto, lo que soy
Es por eso que me renuevo, salto, vuelo y voy
¿Qué me sienta mejor?
¿Aceptar la derrota
o aceptar que eso puede convertirse en la victoria?
Si ya he tocado fondo,
¿Para qué me preocupo?
Justo ahora es cuando a mis miedos yo derrumbo
Es hora de subir, no queda más camino
Nunca me atrevo a creer en aquel cruel destino
Mejor voy y me encargo, de robar el pincel
Y dibujo con él lo que me pega en gana
Dejo de lado las creencias que la gente emana
Dibujo lo que opino,
Lo que en el fondo de mi ser yo siento como mío
Da igual mi ignorancia y mi ser ordinario
Incluso mi fastidio por aquello complicado
Porque aunque todos miran hacia los resultados
No hace falta un genio para ser millonario
Si piensan que de plata, están equivocados
En mi bolsillo habrá derroche de felicidad
Y en el otro reproche con tenacidad
Porque para volar, necesito grandeza
Aquella que se esconde tras la realidad
Esa que nos presenta al extra que se esfuerza
Y al talentoso que decide continuar la siesta
Pero aunque así no sea
No importa, tú camina
Si ya eres un extra, y de paso ordinario
Lucha por convertirlo en un “extraordinario”.