Mauri1908

Soledades enamoradas

Decide filtrarse por la ciudad
la noche de bruma púrpura pesada,
mi soledad, abismo y tu soledad,
viven llamándose entre llantos resabios.

 

La felicidad fingida en mi almohada,
agotada de no hablar con la verdad,
distraída rehúsa la ojerosa mirada,
que habita en un bienestar mercenario.

 

Cuando no miramos la falsedad
situada en las amapolas empapadas,
nuestras soledades se muerden los labios.