Soneto a tu ocaso
Me arropas con el fuego misterioso
del purpúreo fulgor de tu ocaso
y mi furia declina, tras el paso,
de tu pecho, que late candoroso.
No es tu ocaso, un invierno silencioso
inspirado en poemas de un parnaso,
ni aguacero, que a heridas de un fracaso,
desprenda de las nubes, doloroso.
Tu ocaso es ese verso milagroso,
que brilla por su amor y fino trazo;
entonado con canto esplendoroso.
Es suspiro de aliento, tras tu abrazo,
que escapó de mi pecho, vigoroso,
al clavarle, Cupido, tu flechazo.
Autora: EmitzaSR
Su Poetisa antillana🇨🇺