En un rincón del huerto me sale un bostezo,
sentado junto a un muro blanco
al lado de mi perro...
En el lento caminar de la tarde,
el solecito de mayo
mece con su pereza mi mente...
No tengo prisa,
y los ojos se me van cerrando muy despacio
en su caer vacilante...
...Cabeceo...
Y me entrego al sueño.