Walter Brunini

Yeso

Yeso

¿Quién soy yo para decirles la verdad?
Para reclamarles que despierten…
Todos saben lo que es la realidad,
pero se escabullen a dormir entre laureles.
No seré yo quien deje registro de crueldad;
quiero mentirme, igual que ustedes,
hacer vista al costado de los sucesos y
acomodarlo todo con algunos rezos.

Hacer como que tengo corazón de yeso,
sangre de hielo y boca cosida.
Simular andar distraído por la vida;
como recién llegado al mundo.
Mostrarme sorprendido, al oírlos
repetir la opinión de primera plana,
agrandar los ojos y fijar la mirada;
como de haber despertado esa mañana.

Que no le falte trabajo al animador;
yo me ocupo de las estupideces.
Del color de la flor, del canto del gorrión,
del agua que moja y el calor abrasador.
Al fin de cuentas soy poeta, no pensador;
se me está permitido distraerme,
sumergirme en la fantasía y el delirio;
evadirme de este mundo vomitivo.