Ahí estaba ella frente a mí,
provocado por el destino.
ella sin conocerme,
yo sin saber de ella.
Unas miradas se cruzaron,
un que hermosa dama
pasó por mi mente,
¿será qué le causé
muy buena impresión?
Y así de la nada,
un día nos gustamos,
una cita acordamos,
muchos besos nos deleitamos
y sin más que un adiós,
también nos alejamos.