En la vida del padre se refleja la fortaleza,
su amor incondicional es faro en la tormenta,
en cada paso, su guía es una luz que alimenta,
en su mirada, se encuentra la mayor nobleza.
Trabaja sin descanso por el bien de los suyos,
su sacrificio es la semilla de un futuro brillante,
en cada gesto, su entrega es un acto gigante,
en su presencia, se encuentra un amor virtuoso.
En la figura del padre, se halla la seguridad,
su abrazo es refugio en tiempos de adversidad,
en su ejemplo, se forja la verdadera bondad,
en su corazón, late la más pura lealtad.
En la vida del padre, el amor es la esencia,
su presencia es un regalo que perdura,
en cada día, su amor se renueva,
en su ser, se encuentra la mayor presencia.