HOGUERAS AL ATARDECER DE LA VIDA.
Contemplo hechizado
la llama del fuego.
Recibo el calor de su fuerza voraz,
recuerdo el pasado
de ayer, un relato mordaz
de amigos sinceros, abiertos y francos.
Empieza el chispeo
las gotas de brasas
sabrosos y breves repasos
de seres con manos de pasas
ahora todos legos,
con cuerpo de viejos y mentes de sabios
portando cansinos, lejanos fracasos
que un día tuvieron la miel en los labios.
Quemaron los años como ramas secas
brasas convertidas en palabras huecas
que desvanecen el rojizo grumo
en ceniza y humo
pero que aún calientan el cuerpo
y las manos
como los gitanos
que elevan quejíos junto a las hogueras
todos los veranos,
a la luna llena.
moal.