DIA OCTAVO
Nos hicimos a la mar y a poco de salir
de la Hispaniola, fuerte oleaje
estremecía el Bergantín.
Todos nos miramos como recurriendo
al rezo para salvar el viaje y nuestras
vidas. Balboa nos convenció de
desviarnos hacia el sur. El tiempo
amainó. Atracamos finalmente en un
bello lugar de aguas tranquilas. Tiempo
después sería llamado Portobello o
Portobelo por el Almirante Colón.
DIA NOVENO
Tenía que lograr una entrevista con un
famoso pirata HENRY MORGAN, Inglés
que había atacado guarniciones
españolas en varias oportunidades,
ahora quería el oro y las riquezas de
PANAMÁ (Así era llamada ésta parte del
istmo centroamericano)
DIA DECIMO
Finalmente encontramos al pirata. Y le
entrevisté:
J.A.: (justo aldu) M.: (MORGAN)
J.A.: ¿Sr. Morgan, cuál es su aporte al Diccionario del Caminante Bitácora de JUSTO ALDU?
M.: Mi aporte es la letra “P” de
Pirata y de Panamá.
J.A.: ¿Sr. Morgan, si es usted un burdo pirata, porqué le llaman Sir?
M.: Porque fui nombrado caballero por
el rey Carlos II de Inglaterra en 1674.
Muchos me llaman Pirata, pero fui un
filibustero y terminé residiendo en la
isla de Jamaica.
emprendi varias campañas bélicas
contra las posesiones españolas en la
zona del mar Caribe.
J.A.: ¿Saqueó usted Portobello?
M.: Si, si lo hice, no me arrepiento, con
8 embarcaciones y mis mejores
hombres me dirigí a Panamá luego del
ataque a Puerto Príncipe Sabía que
había riquezas provenientes del Imperio
Inca, donde una celda fue llenada con
oro en rescate del hijo de un rey. Todo
ese oro pasaba por Panamá rumbo a
España. Caminé 5 kilómeros con un
contingente de más de 400 hombres y
ataque el castillo de Santiago, luego el
de San Jerónimo, luego ataqué el tercer
fortín. San Felipe. Allí me hablaron de
un tal ALDU, otro loco poeta tal vez,
no le tome importancia hasta que lo
conocí a usted pues el oro era mi
objetivo.
Perdí 70 hombres. Me retiré hacia Cuba,
donde repartí más de 250,000 pesos,
joyas, oro y todo cuanto había allí.
Incluso el amor de unas doncellas.
J.A.: ¿Porque no se llevó el famosoaltar de oro cuando en fecha posteriorsaqueó también la Ciudad de Panamá?
M.: Oh. Vaya, Ese altar lo cubrieron con
barro unos frailes. Jamás me enteré de
su existencia. Me han dicho que es algo
imponente de incalculable valor. Una
verdadera reliquia. Lo hubiera trozado y
repartido con la corona inglesa. Que ya
de por sí tiene una de las joyas más
exquisitas provenientes de Panamá.
Una perla del tamaño de un puño. La
más grande del mundo. La encontraron
en una isla del Pacífico llamada
“Contadora” porque allí se contaban las
perlas que enviaban a la corona, hasta
que fue robada. Ja, ja, j a. ja.
J.A.: Usted incendio la ciudad posterior al ataque?
M.: No, lo hizo PEDRARIAS DAVILA, el
entonces gobernador, para que no me
quedara nada al llegar, pero siempre
encontré uno que otro tesoro.
J.A.: Que piensa de su actuación en la historia?
M.: Bueno, tengo mi fama y mi lugar.
Hoy por hoy, hay modernos piratas que
con sus transnacionales roban la sangre
y el sudor de los países en ésta parte
del mundo pagando las mismas con una
miseria. Esa es la verdad. La realidad
social es muy pobre gracias a esos
gigantes que intervienen en las
economías, muchos quitan y ponen
presidentes y tuercen el brazo a los
dirigentes para saciar sus voraces
bolsillos.
Ellos no son muy diferentes a mí.
También son filibusteros, también roban
al pueblo y le traen miseria. Y también
trabajan como yo lo hice para oscuros
intereses
J.A.: Muchas gracias señor Morgan por
su aporte al diccionario del Caminante,
Bitácora de JUSTO ALDU.
M.: A sus órdenes y mucho cuidado
cuando vayan hacia el norte. Los
AZTECAS son muy sabios e
impredecibles.
Dicho esto nos despedimos de éste
personaje de la historia y su pasaje por
Panamá. Una de las muchas incursiones
que realizó. Un personaje mítico el cual
se ha hecho leyenda por las novelas y el
cine que lo han retratado tal vez como
mucho más de lo que fue. MORGAN,
acabó como acabarán muchos de los
piratas que asolan nuestros pueblos
hermanos. Bebiendo en bares y con una
mala salud. La vida les cobra a éstos
toda la maldad que hicieron.
El viaje por Centroamérica continuó por
la costa hacia el norte.