Maldito día del padre.
Quisiera ser hipócrita y decir que estoy feliz por todos ustedes.
Que envío un fuerte abrazo a cada padre y que cada hijo sea bendecido por contar con su padre.
Pero no.
No puedo.
Pues lo único que deseo y al único que deseo felicitar es al mío.
Pero no está.
Se fue hace tanto tiempo, pero sigue doliendo como si su adios lo acabase de escuchar.
Odio saber que no está y loucho ir lo necesito.
Odio saber que pude haberle dicho no te vayas, pero mi estupido orgullo no me dejó decirlo.
Odio y envidio ver las fotos de tantas personas celebrando y disfrutando a su padre.
Mientras yo quiero salir corriendo a buscarlo, sabiendo que no está en ninguna parte.
Odio que te hayas ido.
Odio que hayas dicho \"siempre estaré contigo\" y no lo hayas cumplido.
Odio tanto no tenerte.
Que no me llevarás contigo.
Odio seguir aquí sola, extrañandote y necesitando te.
Odio que en nadie pueda sentirme como cuando estaba entre tus brazos.
Odio sentir todo ésto, y odio tanto sentir que me faltas.
Nunca podré decir adiós papá, perdón.
Nadmoon