Patricia Aznar Laffont

Arpegios del Alma

Arpegios de la Noche Nublada.

 

Arpegios de las Albas Truncadas.

 

Sones Repetidos en las Sombras

que te Aguardan.

 

Hambre y Sed

y las Luces Siempre Apagadas.

 

No se Detiene,

Nunca Vuelve,

Nunca Pasa,

el Mareante y Ensombrecido

 Dolor de la Carne.

 

Si la Pluma se Embebe

de una Tinta Azulada

No es que tus Versos

Busquen el Vestigio de un Firmamento 

que Calla,

Ni de Aquella Estrella

Asomada a la Ausencia,

ya Quizás Anhelada.

 

Si Duele el Cuerpo, 

No Olvides,

 

Duele el Alma...

 

(Patricia)